¿Llegarán las artes gráficas tarde a su propia renovación?

Tal y como pasa con otros sectores, estamos viendo cómo hay resistencias a los cambios que el entorno actual exige en las empresas. En este caso os hablo de artes gráficas, ¿Sabéis qué es lo que está pasando en este sector?

¿Se están renovando las artes gráficas?

Tengo la suerte de haber vivido y experimentado la educación tanto universitaria como de FP mientras que estaba trabajando lo que me ha dado cierto bagaje para al menos apreciar dónde está el problema que acucia a este sector.

Si preguntas a la mayoría de gente que toma decisiones en este sector tienen respuestas al por qué de la caída de la venta de libros, revistas, prensa, encargos…pero me cuesta encontrar una respuesta con autocrítica del asunto. Y es que amigos, la maldita piratería, los impuestos y sobre todo lo digital, NO son culpables de lo que ocurre y saco a colación estos puntos porque aparte de las artes gráficas, hay muchos otros sectores que justifican sus malos resultados en esto.

«La maldita piratería, los impuestos y sobre todo lo digital, NO son culpables de lo que ocurre»

Está claro que el sector de artes gráficas necesita una renovación, la pregunta clave es, ¿estamos con tanta protesta y creación de grandes enemigos llegando tarde a nuestra propia renovación?

¿Queremos buscar culpables de no renovar digitalmente a un sector que ve paradójicamente a su única salida como principal enemigo?, ¿o empezamos a entender que lo digital es el presente y que no es la gente la que se debe adaptar a nosotros sino nosotros al usuario?

Esta gráfica que te muestro es de 2014 pero ilustra de manera clara hacia dónde va el mercado de la impresión en cuanto a cuota. Y por lo que he visto de algún estudio, en 2015 la tendencia continúa. Todos sabemos lo que está pasando en el total de impresiones de productos gráficos y todos entendemos (salvo los que mandan) que la industria de artes gráficas necesita renovarse, pero ¿dónde está exactamente esa renovación?

La renovación de las artes gráficas está en la mente

Soy de los que se niegan a creerse las falacias de la industria como que el libro en papel está genial, que el offset tiene mucha ‘cuerda’ o todo lo demás, esa no es la realidad, la realidad dice cosas bien distintas como bien marcan estos tres interesantes artículos (entre muchísimos otros):

1. El futuro de la impresión en Europa – extracto del informe de PIRA Smithers
2. La publicidad móvil superará a la de prensa escrita en 2016, y la de internet a la de TV en 2018 
3. La realidad de la industria del libro – Bernat Ruiz Domènech

Tampoco negaré la fuerza que tiene el mundo de la impresión y de las artes gráficas en el Packaging, videojuegos, coches o grandes formatos…no he venido a debatir sobre la necesidad o no de esto sino a decir el mismo mensaje que desde que empecé en 2013 con este blog: hace falta renovarse de verdad. Y no es una cuestión de que no se pueda sino de que no se quiere. 

Es necesario que se dejen de criticar las calidades de la impresión digital, se deje de cuestionar a la web o a los soportes digitales y por consiguiente en vez de buscar enemigos se busquen sinergias…algo que desgraciadamente seguimos sin ver porque y reitero, quienes toman decisiones no tienen capacidad de entender que el mundo ya no es el que era. No pueden entender que salir en la Wikipedia puede tener más valor más que una entrevista impresa en el Washington Post, no ven que un anuncio display en un diario digital es más efectivo en muchos casos que una impresión de una falda en un periódico impreso, en definitiva no ven y lo peor, no quieren ver que el papel ya no es ‘el medio’ sino un medio más.

Creo que es momento de ser críticos, de aceptar un nuevo cambio de modelo y de adaptarnos a él. 

El mayor mal en las artes gráficas es la negación de la realidad…

No acepto que me digan que las artes gráficas son únicamente impresas porque sencillamente no es verdad, tampoco que se está haciendo todo lo posible cuando desde los mismos centros de estudios omiten o dan por encima bien por desconocimiento (grave) o por no considerar importante (peor aún) toda la parte que tiene relación con la parte digital. Cuando se sigue haciendo lo mismo, cuando las empresas de artes gráficas, salvo excepciones, no tienen presencia en internet, no trabajan actívamente sus redes sociales (Torras es un ejemplo clarísimo) ¿criticamos a los bancos de imágenes, a imprentas online con formatos preestablecidos que trabajan la presencia online, a los envato market…? Creo que para criticar lo que hay fuera debemos criticar primero lo que estamos haciendo mal pero ya sabéis, la culpa siempre es de otro y los éxitos son nuestros.

Tampoco acepto que desde la industria se ‘maquillen’ los datos buscando con ello aumentar las subvenciones, o de ‘autoengañarnos’ con premios y por supuesto aunque suene a «no políticamente correcto» tampoco acepto que se culpabilice a la piratería como una de las consecuencias de la caída de ventas en libros, merchandising y demás.

Yo he enseñado algunas de las derivas de renovación que existen en este sector pero hay muchísimas más posibilidades y reitero, el mundo digital no es un enemigo sino un útil aliado en este nuevo paradigma de consumo. Un paradigma de hiperconectividad y saturación dónde las estrategias que de verdad diferencien acabarán triunfando. Es ahí donde las artes gráficas deben entrar para poder renovarse, o al menos donde yo más clara veo la renovación del sector.

Y tú, ¿qué opinas de todo esto?