El futuro de la publicidad exterior tras el COVID-19, un nuevo papel para artes gráficas

Quien más o quien menos conoce las tendencias del mercado en el que trabaja. Y el mercado de la publicidad exterior no es ajeno a esta máxima. Pero no hay que olvidar que como entidad, crea tendencias y a veces, no le gusta seguirlas.

Digo esto porque la pandemia que estamos viviendo provocará un cambio en el modo en que pensábamos que unas y otras construían la publicidad exterior.

No es una máquina que se construye según un modelo y dispuesta a seguir exactamente el trabajo que se ha planeado; sino un árbol que necesita crecer y desarrollarse por todos lados según aquellas tendencias.

Antes de seguir quiero decir que este no es un artículo divulgativo, sino de reflexión sobre lo que ha pasado y hacia dónde vamos dentro del sector de las artes gráficas. Y más en concreto, relacionado con el nicho de publicidad exterior, donde podría desarrollarse.

Las últimas tendencias del sector del retail apuntan hacia patrones de venta omnicliente, donde el poder del cliente sea el factor clave. Ese poder se manifestará en muchos niveles: tecnológica, logística y conectivamente.

De todos estos aspectos, quería hacer una serie de reflexiones que se plasmaron en otros tantos artículos, y más, que desarrollaran temas como el fourooming, las ventas híbridas,  la conexión de hogares, etc. Pero todo ello ha sido eclipsado por un tema latente (COVID-19) que ha parado al mercado, a la industria y que no amenaza al ecosistema que estas tendencias quieren construir… más bien le ha atacado en la línea de flotación.

«Algunas empresas de artes gráficas podrán camuflar su productividad. Las ligadas al packaging, al cartón, papel u ondulados para la industria alimentaria»

El sector de artes gráficas ya estaba reconvertido en otra cosa desde que pasamos la crisis de la burbuja inmobiliaria. No en vano, muchas industrias tuvieron que reconvertirse tras desaparecer la publicidad exterior tradicional. Haciendo que su trabajo se enfocase a otras vías de producción. En el peor de los casos reduciendo plantilla o, además, el cierre patronal.

Con la actual situación las empresas del sector están a medio gas. Algunas hay que pueden camuflar su productividad por necesidades de actividad esencial: nos referimos a las empresas de artes gráficas ligadas al packaging y las que fabrican cartón, papel y ondulados para la industria alimentaria… pero la mayoría de ellas han bajado sus ventas y las tensiones de tesorería por pagos a proveedores las tienen en la lona.

Lógicamente, el mayor activo de este sector son las personas, que guardan su puesto de trabajo durante el ERTE y transcurrido el cual, durante seis meses más hasta la reactivación del mercado. Pasado dicho margen, el resultado de la viabilidad vendrá determinado por el despertar de un sector que tiene en el parón estival el peor enemigo.

Con el verano encima, la campaña turística arruinada y el primer sector productivo en jaque, se me antoja muy difícil la ver la luz del túnel que durará hasta que comience la campaña de navidad para 2020. Lo cual debería empezar a planearse sin demora en cuanto vuelva la actividad. Y muy ligada a partes del ecosistema necesitadas de relanzarse como la hostelería, el retail o la distribución.

«La medicina, junto a las ciencias sociales y la tecnología, han redescubierto las posibilidades del sector con respecto al mercado»

Para los que no lo logren, o no lo quieran ver esa luz de salida que antes nombraba, será el final del viaje: artes gráficas es un sector de empresarios de primera generación que ya se reconvirtieron después de la crisis de 2007, o  cuando no de segunda, pero que en cualquier caso les pueden flaquear las fuerzas para volver a relanzar la actividad.

Para los que lo logren, descubrirán que su ecosistema laboral ha cambiado. Y lo que antes era dogma ahora es solo tendencia, -y de las que al mercado no le gusta seguir-.

Horizonte del papel de las artes gráficas para la publicidad exterior

Porque la medicina, junto a las ciencias sociales y la tecnología, han redescubierto las posibilidades del sector con respecto al mercado, y entre todas han conseguido también dominar nuestro pensamiento, capacidades y pasiones.

Volveremos a hablar de un horizonte del sector del papel de las artes gráficas en próximas entradas: el de la publicidad exterior. Trataremos de redefinir el concepto de retail desde un punto de vista más tecnológico. Porque si, habrá una génesis de retail después de estos tiempos que vivimos.

Las tiendas físicas se van a tener que adaptar, y aunque con más peso, habrá que cambiar el rol de todos los factores que la definen. Los precios y las experiencias de compras serán más individuales que colectivas. Y todo dentro de un escenario de márgenes más y más reducidos. Habrá, en definitiva, ganadores y perdedores.

¿Y vosotros qué pensáis? ¿Creéis que después del parón industrial y comercial las cosas seguirán siendo iguales? ¿Detectáis alguna tendencia que hemos instaurado durante estos días que logrará quedarse?

¡Esperamos vuestros comentarios!