«Al entrar en contacto con un color determinado, éste se sincroniza de inmediato con el espíritu humano, produciendo un efecto decidido e importante en el estado de ánimo».
Qué vas a ver aquí
Cada vez que abres un libro o sitio web que hable sobre la psicología y la teoría del color notarás que hay una notable coincidencia: todos empiezan por el color rojo.
No sé si es la normativa o simplemente coincidencia, aunque he notado que resulta invariable. Hasta puedes memorizar el orden en el que leerás los demás colores: seguimos con el naranja, el amarillo, el verde, el azul y el violeta. Partiremos aquí a los neutrales y posteriormente a tonos como el rosita.
Y heme aquí, confirmo mis sospechas: yo no tengo ese orden… tras analizar mis escritos anteriores y ver como hablé sobre otros colores como el azul índigo, el violeta, el naranja o el rosa, es ahora cuando decido explorar el color rojo, a través del rojo carmín.
El color rojo carmín, el más fascinante de los colores rojos
Como ya es costumbre y un toque personal, no hablaré de todos los rojos sino del que considero más fascinante de ellos: el rojo carmín.
¿Pueden ser los rojos colores fríos?
Recordé una sesión de terapia; ese día venía del trabajo y mí en particular me gusta traer mis materiales para enseñarles a los alumnos; también me agrada colorear con ellos y en esa jornada en particular estábamos coloreando; se me ocurrió llevar conmigo un enorme libro que tengo para dicho fin.
A veces mi mochila es enorme y me parece referencia al Pípila y aunque el volumen sea mucho no me resulta molesto.
Así que en esa misma cita, cuando mi terapeuta me preguntó por la carga, mostré dicho libro; empezó a hojear y ojear, y vi en sus ojos una expresión de cierto terror que empezaba a invadirla hasta que le dije expliqué lo que estaba haciendo:
— Lucía (cambié su nombre), no es lo qué crees. No uso mis colores azules y violetas porque esté deprimida o triste; uso esa paleta de color porque es más fácil de colorear. La paleta fría es más mezclable y sencilla de usar; es más mira, tengo 7 lápices rojos, pero 35 azules y violetas. ¡Observa la diferencia! Es una mera cuestión práctica.
Ella escuchó con atención, así que proseguí con mi explicación:
— Lamento informarte que un diseñador gráfico hará trampas cuando le hables de los colores, ya que nosotros (los diseñadores) también manejamos la psicología del color. Entiendo tu análisis solo aclaro que aquí, en ese caso en particular no te va a funcionar; puedes ver que en otra página trabajo con rojos y mezclo con violetas; es mera trampa y funcionalidad por los pigmentos.
Nunca olvidaré la expresión de preocupación de Lucía, no fue intencional ni tampoco pensé que me analizaría, suena bastante lógico ya que es parte de su trabajo, aunque también del mío el ‘jugar’ con los colores, tonos, matices…
Como consejo; no discutas con un diseñador sobre el color; podrías perder…
¿Qué hace tan especial al color rojo carmín?
Tras este inciso, adentrémonos en las razones por las que elegí el carmín para escribir en esta ocasión:
Un rojo frío y cálido a la vez
El rojo aparece primero en la paleta de los colores cálidos, por lo que asumir o imagina que los rojos pueden ser colores fríos hasta parece un oxímoron ¿no?
Jane Blundell explica en su web como los rojos fríos son aquellos rojos que dentro de la paleta de color, se sitúan en el lado púrpura, en lugar de en el lado amarillo.
«En una paleta primaria dividida, es útil tener uno de cada tipo de rojo para crear colores limpios. (…) Mezclados juntos, el rojo cálido y el rojo frío crearán un hermoso rojo puro que no tiene sesgo naranja ni púrpura. Los rojos fríos se mezclarán con azules para crear púrpuras limpios, con amarillos para crear naranjas medios a neutros y con verde para crear grises«.
El rojo carmín tiene la particularidad de ser de esos pocos puros creados como mezcla de un rojo cálido y otro frío.
Resulta que es un rojo no muy claro y no muy oscuro; no es tan cálido, pero tampoco es frío… es en sí mismo, una mezcla fabulosa que cuenta con casi todos los significados que le brindan los autores más reconocidos.
El rojo ‘Chamra’
El rojo es «el color de las pasiones, de las buenas y malas, del odio o de la idea y del amor» según Eva Heller.
Comprendamos su definición. Partimos de la premisa de que el carmín o el carmesí derivan ambos del latín “chamra”, cuyo significado es rojo.
Él es intenso, ligeramente violento y le brinda un poquito de su frialdad, semioscuro; es el pigmento homónimo que incluye desde la pintura para pared al sexy lápiz labial de Marilyn Monroe.
Los labios rojos de Marilyn se han convertido en un tema recurrente en el arte, la fotografía y el cine. Reinterpretó su imagen de múltiples maneras, manteniendo su estatus como un ícono de la belleza. Así, aunque siguen pasando las décadas, los labios carmín de Marilyn son irremplazables.
El color del poder… y de las emociones
El rojo carmín también tiene aplicaciones en el arte, la moda y el diseño, ya que puede aportar un toque de elegancia y sofisticación. Además, en la psicología del color, se considera que puede estimular la acción y aumentar la confianza.
Mira las corbatas de los hombres en cargos de alto poder: el carmín está ahí.
Sombra profunda del rojo puro, de carácter dominante, llamativo, de gran elegancia y pasión, enérgico de acción y vitalidad, dramatismo y diversas expresiones creativas que únicamente contrasta con blanco y negro; se suaviza mediante el gris o beige.
Un color fascinante que evoca al ‘gusanito’, metafóricamente hablando…
A su vez, en el arte y la literatura, el rojo carmín a menudo se utiliza para transmitir sentimientos de fervor, entusiasmo o incluso ira.
Este color puede representar la intensidad emocional y la fuerza de una experiencia o una idea.
Por ejemplo, en una pintura, el uso de rojo carmín puede atraer la atención del espectador y comunicar una sensación de energía o urgencia. En la literatura, este color puede simbolizar el ardor de un personaje o la profundidad de sus sentimientos.
El fervor asociado con el rojo carmín también puede manifestarse en la cultura a través de celebraciones, eventos y rituales donde este color resalta la importancia y el impacto de las emociones o acciones involucradas.
Un fuerte exponente de los atributos de la feminidad
El rojo carmín es un vibrante aliado de la feminidad. Ha generado una transformación y acompaña al emprendimiento de la mujer que busca dejar el pasado y reivindicarse desde un labial escandaloso y un símbolo feroz de resistencia en tiempos de guerra.
A lo largo de la historia, figuras icónicas como Marilyn Monroe y otras mujeres en el cine y la cultura popular han asociado el color rojo con la fuerza y la seducción.
En tiempos de guerra, este simbolismo se amplifica, ya que las mujeres pueden verse a sí mismas como portadoras de esperanza y resiliencia.
Durante períodos de conflicto, el uso de labios rojos puede representar un intento de aferrarse a la normalidad y la belleza en medio del caos.
Las mujeres a menudo recurren al maquillaje como una forma de expresar su individualidad y dignidad, incluso en situaciones desafiantes.
Ejemplos de ello son los labios tiernos de las japonesas y el símbolo de diferencia de la reina Elizabeth I, creyéndose que poseía poderes curativos. También sucede en el maquillaje azteca poseía un rojo más hipnotizante de lo que cabía en la imaginación que se llama Nocheztli (sangre de tuna).
Carmín, suave, dulce y exquisito carmín, de personalidad vívida, inherente de una enorme personalidad y de una gran visibilidad con un toque de ira, venganza y una deliciosa lujuria, con la dulzura de una fresa jugosa; la bondad y simpatía de una cereza madurita.
Para las mujeres, usar el rojo es señal de pasión, poder, amor y valentía; es el color que posee la cualidad de despertar todas las emociones particularmente intensas, por su energía brillas, declaras con firmeza tu poder, tu pasión y elegancia. Destina en tu armario un bonito vestido rojo que lleves con unas lindas sandalias.
El rojo carmín y su presencia en la flora
La presencia del rojo carmín es basta en la naturaleza, en particular en muchas flores como antuarios, lirios, tulipanes o ciertas rosas, cuyo color eleva a estas plantas por encima del resto.
Epílogo: el país de las maravillas está teñido de rojo carmín
Te cuento que, de acuerdo con la sabiduría del Feng Shui, el rojo tiene la sabiduría, el equilibrio y la armonía cuando se emplea en un lugar de honor.
Invita a la pasión y al coraje y la riqueza en todas sus formas. Es empoderamiento. Es armonía personal. Administra además efectos poderosos a la autoestima, porque genera seguridad y tiene la capacidad de atraer vibras positivas y la buena fortuna.
En la espiritualidad es protector contra malas energías y espíritus; así que en muchas culturas se utilizan lazos de este color para proteger a su portador.
Este emocionante color siempre será asociado con la pasión, el amor y el fervor, se utiliza a menudo en contextos artísticos y literarios para simbolizar sentimientos intensos…
El fervor asociado con el rojo carmín también puede manifestarse en la cultura a través de celebraciones, eventos y rituales donde este color resalta la importancia y el impacto de las emociones o acciones involucradas.
El término «pasión del carmín” podría evocar imágenes de amor intenso, entusiasmo ardiente o una poderosa expresión emocional, todo centrado en la fuerza y la profundidad que el color carmín aporta.
La combinación de «rojo carmín» con «el País de las Maravillas» evoca una imagen intensa y surrealista, fusionando el tono vibrante del rojo carmín con el ambiente fantástico y caprichoso del País de las Maravillas. Este podría contrastar simbolizar pasión, intensidad o peligro dentro de un entorno de fantasía.
Imaginar a personajes como la Reina de Corazones envuelta en un manto de rojo carmín o un paisaje onírico teñido de este color, transformaría la atmósfera del cuento en algo aún más visualmente impactante y emoción.
Terminemos con este extracto: «Es considerado el color del amor, el calor, la energía y la afección. El carmesí posee una personalidad vívida, que es derivada de su inherente gran visibilidad. Sin embargo, también es un color que representa a la sangre, así que suele emparejarse con la ira, venganza e incluso lujuria».
Por todo lo explicado en este artículo, el rojo carmín es el tono perfecto del rojo; ya que tiene la vibración procedente del fuego ardiente y del escalofrío del violeta.
Lissete Ingelmo es diseñadora gráfica especializada en Tipografía y docente con casi diez años de experiencia. Su segunda pasión es escribir.
Josefina
Realmente muy interesante la información, y muy buenas fotografías.
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